Aquí hablaremos de la fundación de la bella ciudad
cafetalera cordobesa, cuya ciudad hermana la podemos encontrar en la propia
Madre Patria, pero está fundada por la sabia mano árabe, la incomparable
Córdoba, España, la cual contaba con calles pavimentadas al tiempo que la
Europa occidental se debatía en plena Edad Oscura.
“Siendo una de las ciudades más importantes del estado de
Veracruz, que ha crecido con el paso de los siglos, a través de grandes
acontecimientos históricos, con el sudor y el gran esfuerzo de 30 jefes de
familias, lograron fundar la ciudad de los 30 caballeros; mejor conocido como:
la ciudad de Córdoba.”
Al decir la verdad, la fundación de Córdoba no estaba
previsto; este proceso de establecimiento surgió en base a las necesidades que
se fueron presentando, entre ellos: la llegada de los esclavos, la abolición de
la esclavitud y principalmente los asaltos a diligencias que iban rumbo a
México o de México a Veracruz.
El origen
Originalmente era conocida como Lomas de Huilango. Huilango,
en lengua Náhuatl significa "Lugar donde habitan las palomas".
Córdoba era uno de los poblados ubicados en un punto
estratégico en la ruta de los virreyes que transitaban desde el Puerto de
Veracruz hacia la antigua Tenochtitlán.
Cuando por ahí pasaban, sus caravanas eran saqueadas por los
pobladores y otros vecinos que se sentían sometidos por los nuevos hacendados.
Entonces para ponerle fin a esta situación y además sacarle provecho al lugar,
los españoles decidieron fundarla.
La fundación de Córdoba tuvo lugar el 26 de abril de 1618,
los ataques y asaltos que los negros cimarrones encabezados por el Negro Yanga,
realizaban el camino real Veracruz-Orizaba-México, obligaron a los españoles a
fundar una población en el sitio de los esclavos, a fin de proteger a los
súbditos fieles y a los intereses reales.
Cuatro vecinos de Huatusco: Don Juan Cristóbal de Miranda,
Don García de Arévalo, Don Andrés Núñez de Illescas y Don Diego Rodríguez,
solicitaron al Márquez de Guadalcazar Don Diego Fernández de Córdoba, Virrey de
la colonia y a quien debe su nombre la ciudad, la fundación de Córdoba
autorizada por el Rey de España Felipe III el 29 de noviembre de 1617.
Así mismo, se llevó a cabo la ceremonia el 26 de abril de
1618, en la iglesia parroquial de Amatlán de los Reyes, acudiendo a la misa
solemne los 30 caballeros con sus familias, quienes serían los fundadores
primitivos de la Villa de Córdoba. Posteriormente eligieron a su
alcalde mayor a Don Francisco de Soto Calderón. Al día siguiente el 27 de marzo
de ese mismo año salieron en caravana, al lugar, Lomas de Huilango, sitio donde
quedaría hoy sentada la Ciudad de Córdoba en honor al Virrey, que por
muchos años fue conocida como la Ciudad de los 30 caballeros debido a
las 30 familias primitivas que fundaron la ciudad.
La ciudad de los 30 caballeros
Considerando el Virrey el gran servicio que se pretendía
hacer y habiendo estado de acuerdo con el sitio que se había seleccionado para
ello “Las lomas de Huilango” se procedió a la fundación autorizada por el
Felipe III. Uno de los requisitos más importantes que pedía el Rey era que la
villa fuera fundada por 30 jefes de familia, de ahí la denominación histórica de
“La Ciudad de los 30 Caballeros”.
Siendo Córdoba una ciudad fundada por 30 caballeros
españoles, es natural que algunas tradiciones hispanas se practiquen en la
localidad, de las cuales solo algunas se han conservado. Entre estas destacan
los festejos de Covadonga, en septiembre, durante los cuales pasean por las
principales calles de la ciudad un gran ramo de flores en forma de corona que
posteriormente es depositada como ofrenda en un altar de la parroquia. Los
participantes en este desfile portan trajes típicos españoles como gallegos,
sevillanas, asturianas, etc.
No hay comentarios:
Publicar un comentario